Tirarían primero la catedral antes de sólo proponerlo. Quien nos va a dejar los malos y perversos hombres y mujeres provenientes de Sodoma y Gomorra, amar a otra persona cuya similitud es tal que hasta parece ser del mismo sexo.
Del demonio, tendrían que huir como ratas al DF, para consolidad sus pecaminosas intensiones. Ahí donde la degradación llega a profundos y terribles lugares que hasta les dan papeles. Impúdicos.
Quien nos dará la oportunidad de tener hijos, pregúntome yo. Por eso la naturaleza no se hizo para los desgraciados como nosotros. Diría un poblano reluciente de doble moral, católicos dominguero, cuyo estupor es incomensurable cuando alguien no se santigua ante cualquier altar,
Seguro que va en su auto mientras sermonea a su hijo de closet gay y dirige ésta acalorada aseveración sacando la mano de su auto y bajan el vidrio, pero poco, para que no se note su asco y le da una moneda a la "indita", que pide dinero en la esquina, con tres niños en el piso, diciendo "Hay mujer de Dios", pero uno tiene que darles, porque pobrecitos, ve como tienen a los niños, el gobierno tiene la culpa. Pero ya Dios arreglará esto cuando llegue el tiempo.
A ellos debería ayudar esos defeños y no esos asquerosos que pretender tener niños y adoptarlos, qué moral. ¡Qué asco!.
Mientras aquella indita, se queda atrás, tratando de olvidar las veces que de niña apenas un par de años atrás de eso, fue violada en la calle, o utilizada para el comercio sexual al que el mismo señor hace galantería y presencia, porque para eso son y para qué se venden para eso.
No la ha importado que esos niños es de un borracho de la calle o de él mismo. Los cuales a falta de oportunidades que un asqueroso gay no le pudo dar, estarán en la la cárcelo muertos, pero no importa porque iran al cielo y nosotros no. Aunque esos mismos niños podrían ir a la escuela y ser mujeres y hombres de bien. Pero no, con la perversidad de los gays, lesbianas y esa gente que viende de las cárceles el nfierno se lo tendrán aqui, mientras estén vivos.
Aquí esta entonces en ésta fotografía el reino de los cielos a donde iran los buenos. Pero no, definitivamente nosotoros no.
